Manejando El Estrés Traumático: Lidiando con el Huracán desde Lejos

Aún si usted no ha sido directamente afectado por el huracán, puede que experimente una sensación de vulnerabilidad al ser testigo de los resultados del desastre.

Esto puede ser especialmente fuerte si un pariente o amigo fue afectado por el desastre, particularmente, si no ha tenido noticias sobre su estado después de la tragedia.

Tómese un descanso de las noticias. Mirar indefinidamente las repeticiones noticiosas acerca del desastre pueden estresarlo aún más. Aunque usted quiera mentenerse informado, especialmente si seres queridos han sido impactados por el desastre, deje de ver las noticias por un rato.

Sea amable con usted mismo. Algunos sentimientos, cuando se observa un desastre, pueden ser difíciles de aceptar. Es posible que sienta alivio de que el desastre no lo tocó a usted directamente o puede que se sienta culpable porque no le afectó, cuando tantos otros han sido tan gravemente afectados. Ambos sentimientos son comunes.

Mantenga las cosas en perspectiva. Aunque un desastre es horrorizante, debe enfocarse también en las otras cosas que están bien en su vida.

Encuentre una manera productiva de ayudar, si le es posible. Muchas organizaciones son establecidas para proveer ayuda financiera o de otro tipo a las víctimas de desastres naturales. Contribuir puede ser una manera de ganar algún "control" sobre el evento.

Controle lo que puede. Hay rutinas en su vida que puede continuar y algunas veces necesita hacerlo, incluyendo tomarse un descanso y dejando de pensar acerca del desastre.

Busque oportunidades de auto-descubrimiento y reconozca sus fortalezas. La gente a menudo aprende algo acerca de sí mismas en tiempos adversos y pueden encontrar que han crecido en algún aspecto como resultado de perseverar durante esos tiempos difíciles. Muchas personas que han experimentado tragedia y adversidad han reportado mejores relaciones, mayor sentido de fortaleza personal aún mientras se sentían vulnerables, han incrementado el autoconcepto y el valor de sí mismas, han encontrado una espiritualidad más profunda y una apreciación más elevada por la vida.

¿Cuándo debería buscar ayuda profesional?

Muchas personas son capaces de enfrentar efectivamente las demandas físicas y emocionales que acompañan a un desastre natural al usar su propio sistema de apoyo. No es inusual, sin embargo, encontrar que persisten serios problemas y que éstos continúan interfiriendo con el diario vivir. Por ejemplo, algunos pueden sentir un nerviosismo abrumador o una tristeza constante que afecta negativamente el desempeño laboral y las relaciones interpersonales.

Las personas con reacciones prolongadas que obstaculizan su funcionamiento diario deberían consultar con un profesional de la salud entrenado y experimentado. Los psicólogos y otros proveedores de salud mental apropiados pueden ayudar a educar a las personas acerca de las reacciones comunes al estrés extremo. Estos profesionales trabajan con personas afectadas por trauma y les ayudan a encontrar formas constructivas de lidiar con el impacto emocional.