Detección y Diagnóstico del Cáncer
El detectar el cáncer en su etapa temprana puede afectar el resultado de la enfermedad de ciertos cánceres. Cuando el cáncer se detecta, un médico determinará qué clase es y qué tan rápido está creciendo. él o ella también determinará si las células cancerosas han invadido los tejidos saludables cercanos o si se han diseminado (metastatizado) a otras partes del cuerpo. En algunos casos, la detección temprana del cáncer puede reducir el riesgo de que una persona muera por causa del cáncer. Por esta razón, la mayor prioridad de los investigadores de cáncer actualmente es mejorar los métodos para la detección temprana.
El Cáncer En Etapa Temprana Puede No Tener Algún Síntoma
Algunas personas visitan al médico únicamente cuando sienten dolor o cuando notan cambios, como por ejemplo, una masa o nódulo en el seno o sangrado o descarga fuera de lo común. Pero no espere hasta ese momento para ser examinado(a) debido a que el cáncer en etapa temprana puede no tener algún síntoma. Esa es la razón por la cual los exámenes de detección para algunos cánceres son importantes, particularmente a medida que se envejece. Los métodos de detección están diseñados para detectar el cáncer en las personas sin síntomas.
Examen de Detección del Cáncer Cervical
Una técnica de detección conocida como la prueba de Papanicolaou permite la detección temprana del cáncer cervical (cáncer del cuello de la matriz o útero), la porción estrecha del útero que se extiende hacia abajo dentro de la parte superior de la vagina. En este procedimiento, un médico utiliza un cepillo pequeño o un raspador hecho de madera para remover una muestra de células del cérvix y de la parte superior de la vagina. Después, las células son colocadas en un portaobjetos y enviadas a un laboratorio en donde se utiliza un microscopio para detectar anormalidades. Desde la década de 1930, la detección temprana por medio del uso de la prueba de Papanicolaou ha ayudado a disminuir los índices de muerte a causa del cáncer cervical (cáncer del cuello de la matriz o útero) en más de un 75 por ciento.
Puede ser necesaria una prueba adicional si se llegan a encontrar anormalidades. Actualmente hay 13 tipos de alto riesgo de papilomavirus humanos (HPV, por sus iniciales en inglés) reconocidos como la causa principal del cáncer cervical. La Administración de Alimentos y Fármacos de los EE.UU. ha aprobado una prueba de HPV que puede identificar su presencia en una muestra de tejido. Esta prueba puede detectar los virus aún antes de que haya algún cambio visible conclusivo en las células cervicales.
Exámenes de Detección del Cáncer de Seno
Algunas veces el cáncer del seno puede ser detectado en sus primeras etapas por medio de un mamograma, el cual es una radiografía del seno. La mamografía beneficia más a las mujeres a medida que envejecen y a aquéllas que están pasando por la menopausia. La mamografía es una herramienta de detección que puede detectar la posible presencia de una masa de tejido anormal. Por sí sola, la mamografía no es lo suficientemente precisa para proporcionar una evidencia definitiva de la presencia o ausencia del cáncer de seno. Si un mamograma indica la presencia de una anormalidad, se harán más exámenes adicionales para determinar si en realidad está presente el cáncer de seno.
Pruebas de Detección del Cáncer de la Próstata y de Ovario
La Administración de Alimentos y Fármacos de los Estados Unidos ha aprobado la prueba de antígeno prostático específico o prueba de PSA (por sus siglas en inglés) junto con un examen rectal digital para ayudar a detectar el cáncer de la próstata en los hombres de 50 años de edad y mayores. Los médicos frecuentemente utilizan la prueba de PSA y el examen rectal digital como pruebas de detección del cáncer de la próstata; juntas, estas pruebas pueden ayudar a los médicos a detectar cáncer de la próstata en hombres que no presentan síntomas de la enfermedad. Sin embargo, la mayoría de los hombres con una prueba de PSA elevada resulta que no presentan cáncer; sólo entre 25 a 30 por ciento de los hombres que se realizan una biopsia debido a niveles de PSA elevados, en realidad presentan cáncer de la próstata, por lo que los investigadores están colaborando arduamente para encontrar nuevas pistas. Los expertos están tratando de desarrollar mejores pruebas sanguíneas que pudieran alertar a las personas con respecto a las malignidades mientras que los cánceres aún estén en sus etapas tempranas. Por ejemplo, están bajo desarrollo varias nuevas pruebas de la sangre para el cáncer de ovario o de la próstata.
Examen de Detección del Cáncer de Colon
Un procedimiento conocido como la prueba de sangre oculta en heces (FOBT, por sus siglas en inglés) detecta cantidades invisibles de sangre en las heces, lo cual es una posible señal de diversos trastornos, incluyendo el cáncer de colon. La prueba no es dolorosa y se puede hacer en casa o en un consultorio médico junto con un examen rectal. Utilizando un aplicador se unta una muestra de heces en una tarjeta químicamente tratada, la cual será médicamente examinada en un laboratorio en busca de evidencia de sangre. Si se confirma la presencia de sangre en las heces, se pueden llevar a cabo pruebas más sofisticadas para encontrar la fuente del sangrado.
Algunas otras opciones incluyen la sigmoidoscopia y la colonoscopia. El primer examen utiliza un instrumento con luz conocido como sigmoidoscopio para encontrar crecimientos precancerosos o cancerosos en el recto y colon inferior. El segundo examen utiliza un instrumento con luz conocido como colonoscopio para encontrar crecimientos precancerosos o cancerosos por todo el colon, incluyendo la parte superior.
La Biopsia
Para diagnosticar la presencia de cáncer, el médico tendrá que ver una muestra del tejido afectado bajo un microscopio. Por lo tanto, cuando los síntomas preliminares, la prueba de Papanicolaou, el mamograma, la prueba de PSA o la prueba de sangre oculta en heces (prueba FOBT) o colonoscopia indican la posible existencia de cáncer, el médico entonces tendrá que llevar a cabo una biopsia, la cual consiste en la remoción quirúrgica de una muestra pequeña del tejido para su examen microscópico. (En el caso de las leucemias, una muestra pequeña de sangre sirve para el mismo propósito). Este examen microscópico le indicará al médico si existe en realidad un tumor, y si lo está, si es maligno (cáncer) o benigno. Además, se pueden utilizar microconjuntos para determinar cuáles genes se activan o se desactivan en la muestra o se pueden recolectar perfiles proteómicos para un análisis de actividad de proteína. Esta información le ayudará a los médicos a realizar un diagnóstico más preciso y puede hasta ayudar a una planificación de tratamiento más informado.
Apariencia Microscópica de las Células Cancerosas
Bajo el microscopio el tejido canceroso se caracteriza por su distintiva apariencia. Entre las características que el médico busca están: un gran número de células de forma irregular, dividiéndose, la variación en el tamaño y la forma nuclear, la variación en el tamaño y la forma de la célula, la pérdida de las características especializadas de la célula, la pérdida de la organización normal del tejido y un límite externo mal definido del tumor.
La Hiperplasia
En lugar de detectar un tumor benigno o maligno, el examen microscópico de la muestra de la biopsia a veces detecta una condición conocida como "hiperplasia". La hiperplasia se refiere al aumento de tamaño de un tejido que ocurre por la excesiva tasa de división de células, lo cual conduce a un número de células más grande de lo normal. Sin embargo, la estructura celular y el arreglo ordenado de las células dentro del tejido permanecen normales y el proceso de hiperplasia es potencialmente reversible. La hiperplasia puede ser una reacción normal del tejido hacia un estímulo irritante. Un ejemplo de hiperplasia es un callo que se haya formado en su mano cuando, por primera vez, aprendió a usar una raqueta de tenis o un palo de golf.
La Displasia
Además de la hiperplasia, el examen microscópico de la muestra de la biopsia puede detectar otro tipo de condición no cancerosa llamada "displasia". La displasia es un tipo anormal de proliferación excesiva de células, caracterizada por la pérdida en el arreglo del tejido normal y la estructura de la célula. Estas células con frecuencia regresan a su estado normal, pero en ocasiones gradualmente se convierten en malignas. Las áreas con displasia deben ser monitoreadas estrechamente por un profesional médico debido a su potencial para convertirse en malignas. En algunas ocasiones éstas requieren tratamiento.
Carcinoma in Situ
Los casos más severos de displasia a veces se conocen como "carcinoma in situ". En latín, el término "in situ" significa "en su lugar", así pues, carcinoma in situ se refiere a un crecimiento descontrolado de células que permanece en su sitio original. Sin embargo, el carcinoma in situ puede convertirse en invasor, maligno metastásico, y por lo tanto, generalmente se remueve quirúrgicamente, si es posible.