La administración de medicamentos prescritos
Siga las indicaciones de su médico y lea (y guarde) la información que viene con el empaque, si la trae. Pida que su médico le anote las indicaciones para la administración del medicamento, si usted teme no haberlas entendido claramente o si le preocupa la posibilidad de olvidarlas.
Tome el medicamento durante todo el período para el cual fueron prescritas, aun cuando usted se sienta mejor.
Tome únicamente sus propias medicinas. Si toma un medicamento de otra persona, eso podría ocultar sus síntomas y dificultarle a su médico el diagnóstico de su enfermedad.
Conozca sus medicamentos. Si usted toma más de un medicamento, debe poder diferenciarlos por su tamaño, forma y color, por el número o nombre que lleva impreso, su presentación (tableta o cápsula), o su envase.
Prepare los medicamentos que necesita tomar durante la noche. Si debe tomar más de un medicamento, trate de no mantenerlos al lado de su cama. Si no le queda otro recurso, y en su casa no hay ni niños ni animales domésticos, ponga las píldoras que tomará durante la noche sobre su mesa de noche. Encienda la luz y asegúrese de que está tomando la medicina correcta a la hora debida.
Organice sus medicamentos en su casa. Muchas personas usan un formulario o calendario por escrito para llevar el control de sus medicinas. Algunos prefieren usar envases con tapas de distintos colores, divididos en varias secciones, o los que vienen con alarmas que suenan en un momento determinado.
Mantenga los medicamentos en un lugar fresco, seco, sin mucha luz. Un gabinete de la cocina o una repisa del dormitorio podrían ser buenos lugares para guardarlos. Los medicamentos no deben guardarse en lugares en donde el calor y la humedad puedan alterar su eficacia. No ponga los medicamentos dentro del refrigerador, a menos que el médico, el farmacéutico o la etiqueta así lo indiquen.
Antes de salir de viaje, pregúntele a su médico o farmacéutico cómo adaptar el horario para la administración de su medicamento de acuerdo con los cambios de hora, de rutina y alimentación. Lleve consigo los números telefónicos de sus médicos y farmacéuticos. Si viaja en avión, lleve consigo sus medicinas; no las empaque dentro del equipaje que entregará a la aerolínea. Cuando esté viajando mantenga siempre sus medicamentos protegidos contra el calor y la luz directa del sol.
Si en su casa viven niños, recuerde que debe mantener sus medicamentos donde no los vean y estén fuera de su alcance, y no tome sus medicinas delante de ellos.
Vuelva a comprar sus medicinas prescritas con suficiente antelación de modo que no se le terminen, lo cual podría crear problemas con el horario para su administración. Si compra sus medicinas a través de la Internet, compruebe si el sitio en la Red participa en el programa de Sitios con prácticas farmacéuticas por la Internet verificadas (VIPPS) y si tiene el sello de aprobación correspondiente, a fin de asegurarse de que esté debidamente autorizado y haya pasado el examen e inspección de la National Association of Boards of Pharmacy (Asociación Nacional de Juntas de Farmacia) (www.nabp.net).
Mantenga siempre sus medicinas en sus envases originales, y nunca ponga más de un medicamento en el mismo envase.
La administración de medicamentos de venta libre
Los botiquines de hoy en día contienen una variedad cada vez amplia de medicamentos de venta libre para tratar un número cada vez mayor de malestares. Entre las medicinas de venta libre más comunes se cuentan los analgésicos, los laxantes, los expectorantes y los anticatarrales. Algunos de estos remedios, sin embargo, pueden influir en la manera en que los medicamentos prescritos hacen su efecto o son utilizados por el cuerpo. Consulte siempre con su médico acerca de las medicinas de venta libre que usted toma. Es importante recordar lo siguiente:
Lea y siga siempre las indicaciones en la etiqueta del medicamento. Las etiquetas de los medicamentos de venta libre contienen toda la información que necesita para tomarlo correctamente, y le indican:
- los ingredientes activos e inactivos,
- para qué sirve el medicamento,
- las interacciones o efectos secundarios que podrían producirse,
- cómo y cuando (o cuándo no) tomarlo, y
- otras advertencias.
Seleccione medicamentos de venta libre que tengan sólo los ingredientes que usted necesita. Es mejor usar solamente la medicina que trata los problemas o síntomas que usted tiene. Pídale ayuda al farmacéutico. Si está tomando más de un medicamento, préstele atención a los "ingredientes activos" para evitar una dosis excesiva del mismo ingrediente.
Compruebe que el paquete no haya sido abierto y que no haya pasado su fecha de expiración- No compre medicinas cuyo envase esté abierto o que tenga la fecha de expiración vencida. La fecha de expiración le indica que una vez vencida el producto posiblemente ya no sea tan eficaz. Consulte con su médico si se acostumbra a tomar regularmente remedios de venta libre. La mayoría de este tipo de medicamentos deben tomarse durante poco tiempo.
Si tiene preguntas acerca de medicinas específicas, visite el sitio en la National Library of Medicine (Biblioteca Nacional de Medicina) en www.medlineplus.gov y haga clic en "Drug Information" ("Información sobre medicamentos").