Vivir Saludablemente, Trabajar Bien Durante el Cambio

Ninguno de nosotros está inmunizado contra el cambio. Experimentamos el cambio todos los días-desde los pequeños inconvenientes como dar un rodeo para llegar al trabajo, hasta los episodios que alteran nuestra vida, como la pérdida de un ser querido. En el complejo mundo actual, no es que no esperemos cambios en nuestras vidas. Es, simplemente, que sería agradable disponer de una advertencia por anticipado. A continuación aparecen algunos de los tipos de cambio que puede experimentar:

  • Cambios en las relaciones-matrimonio, finalización de una relación o pérdida del cónyuge o de un miembro de la familia
  • Cambios en el medio laboral-fusión de la compañía, pérdida del puesto de trabajo o promoción laboral
  • Cambios en la calidad o en el estilo de vida-nuevo hijo, adopción, cambio de domicilio, progenitores de edad avanzada o enfermedad

En Nuestras Vidas se Deben Producir Ciertos Cambios

Mírelo de esta forma-el cambio es una de las cosas que hacen interesante la vida. Algunos cambios son decisión nuestra. . . ¿Cuántas veces ha oído la historia de alguien que vivía su vida siguiendo las mismas rutinas y que, de repente, lo dejó todo para vivir en una cabaña en el bosque? La mayoría de nosotros no necesitamos realizar un cambio tan espectacular para cumplir con nuestras vidas. Los cambios menores, por ejemplo, un nuevo puesto de trabajo o aprender cómo tratar mejor a nuestros hijos en los difíciles años de la adolescencia, son normalmente suficiente para mantener el avance de la vida. Y otros cambios, sencillamente, se producen . . . una persona pierde su puesto de trabajo o se enfrenta a una enfermedad grave. Incluso estos retos pueden resultar experiencias positivas para nuestro desarrollo como personas.

Todos nosotros esperamos enfrentarnos al cambio en nuestras vidas y cada uno de nosotros responderá de manera diferente Algunos nos veremos paralizados por el cambio y encontraremos difícil tomar una decisión, mientas que otros pueden sentirse motivados por el cambio para llevar a cabo transiciones positivas en sus vidas. Algunos somos lo suficientemente afortunados para ser capaces de anticipar el cambio. Sea cual sea el modo en el que reaccionemos ante el cambio, todos nosotros podemos beneficiarnos sopesando nuestras opciones y trabajando con alguien que pueda ofrecernos algunas pautas para ayudarnos a tomar la mejor decisión.

El Cambio Conlleva Estrés

Sea cual sea el planteamiento que adoptemos para enfrentarnos a los cambios, éstos producen estrés. La misma palabra ?cambio? significa dejar de lado, abandonar o variar a algo nuevo. Por sí solo, esto es suficiente para provocar ansiedad. Habitualmente, el cambio sigue un proceso. El ritmo por el que pasemos por este proceso depende de la rapidez con la que nos adaptemos al cambio. La comprensión del proceso del cambio es fundamental para reducir al mínimo el estrés y continuar hacia delante. Tenga en cuenta que cada persona se enfrenta a cada etapa de manera diferente.

El Proceso del Cambios

Primera Etapa? Negación. La primera respuesta al cambio es, normalmente, negar o reducir al mínimo la amplitud del cambio. Es similar a una reacción de shock que nos permite continuar funcionando hasta que podamos aprehender el sentido de la noticia. Aunque toda esta actividad puede hacer parecer que la persona se está enfrentado bien al cambio, en realidad está enmascarando el deseo de no enfrentarse a lo que está sucediendo en su vida.

Segunda Etapa? Resistencia. Después de que la realidad del cambio se hace notar en toda su amplitud, esta etapa puede provocar ira, ansiedad y depresión. ésta es la fase en la que la incertidumbre, las dudas sobre uno mismo y la baja autoestima salen a la superficie. Las personas que se concentran en el impacto que el cambio está teniendo en ese mismo momento en sus vidas, se muestran reticentes a la hora de mirar hacia delante, y pueden estar ocultándose, de forma inconsciente, por medio de actos o pensamientos de autodefensa.

Tercera Etapa? Exploración. Después de pasar por un período de negación y duda, la mayoría de las personas entran en la siguiente etapa, que es más optimista y está más orientada al futuro. Es como si, al haber pasado por las dos primeras etapas, la persona confiara más en que puede sobrevivir al cambio. Las personas comenzarán a explorar otras posibilidades, nuevas oportunidades y empezarán a considerar qué pueden aprovechar de la situación.

Cuarta Etapa? Aceptación y Nuevo Compromiso. ésta es la etapa final del proceso de cambio. En esta etapa, las personas han desarrollado nuevos objetivos y han pasado por un cambio emocional de la ansiedad a la autoconfianza renovada. Es el momento que las personas describen, con frecuencia, como haberse quitado un peso de encima. No se ha olvidado el pasado, pero aquí está el hoy y el futuro aguarda.

No existe un horario o plazo límite para enfrentarse al cambio. Es un viaje personal y emocional y cada persona pasa por estas etapas con un ritmo propio. Por lo tanto, tampoco se puede esperar que otra persona pase por todo ello con un ritmo similar al de uno mismo.

Algunas personas intentan cortocircuitar sus propias emociones en un intento de huida hacia delante para continuar con sus vidas. Estas personas caminan en la cuerda floja de la Primera a la Cuarta Etapa. Saltar de la negación al compromiso sin pasar por la ira, la pérdida, la tristeza y la ansiedad no significa que estos sentimientos no existan. Confunden el entumecimiento de los sentimientos con la conquista de sus emociones. Pero estos sentimientos están obligados a salir a la superficie tarde o temprano.

Modos Saludables de Enfrentarse al Cambio

Enfrentarse al cambio puede resultar más sencillo si no negamos la posibilidad de que se produzca. A continuación aparecen algunos consejos para enfrentarse a los cambios cuando éstos se producen.

  1. Reconocer que el cambio forma parte de la vida. La vida sería aburrida y estaría estancada si las cosas no cambiaran. El cambio nos mantiene activos, vivos.
  2. Anticipar el cambio. No esté demasiado satisfecho consigo mismo. Ser flexible y estar abierto a los cambios disminuirá la sorpresa cuando éstos se produzcan.
  3. Monitorizar el cambio a su alrededor. Sea un participante activo en la vida y fíjese en lo que le circunda. Será capaz de pronosticar el cambio y de enfrentarse a él con mucha más facilidad.
  4. Adaptarse al cambio con rapidez. Cuando comience a anticipar y monitorizar el cambio, será capaz de adaptarse con más rapidez y menos estrés.
  5. Aprender a disfrutar del cambio. Comprenda que el cambio es una parte necesaria de la vida.
  6. Esperar que el cambio se produzca una y otra vez-una y otra vez. La vida constituye una serie de cambios.

Si desea descubrir más sobre el modo de enfrentarse a los cambios, llame al Programa de Asistencia al Trabajador. Los asesores están disponibles 24 horas al día, los siete días de la semana para proporcionarle asistencia confidencial.